Los discursos parlamentarios de Práxedes Mateo-Sagasta

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Legislatura: 1871-1872 (Cortes de 1871 a 1872)
Sesión: 20 de mayo de 1871
Cámara: Congreso de los Diputados
Discurso / Réplica: Réplica al Sr. Ortiz de Zárate
Número y páginas del Diario de Sesiones 40, 959
Tema: Separación de los presos por delitos comunes de los por delitos políticos y abusos de las autoridades

El Sr. Ministro de la GOBERNACIÓN (Sagasta): Dos preguntas ha hecho el Sr. Ortiz de Zárate. La primera se refiere al deseo, ya manifestado en otra ocasión, de que los presos políticos estén completamente separados de los presos por delitos comunes.

Tuve el gusto de contestar a S. S. en otra ocasión, que ese era el pensamiento del Gobierno, pero que su realización tropezaba con dificultades materiales que el Gobierno trataba de resolver y de vencer. Se trabaja en eso; se hace todo lo que se puede; pero el Sr. Zárate sabe bien cuales son las condiciones que tienen nuestras prisiones y las cárceles públicas, lo mismo en Madrid que fuera de Madrid: apenas hay una que tenga condiciones al efecto. Hay una comisión nombrada de Sres. Diputados, de personas importantes, que se han ocupado mucho de ese trabajo; pero naturalmente, tropiezan con el inconveniente de los edificios. Sin embargo, el Gobierno tiene ya estudiado su proyecto para ver de salvar eso en cuanto sea posible; y por de pronto, en vista de que la época en que eso pueda hacerse se va retrasando, porque los edificios no tengan condiciones al efecto, se darán las órdenes oportunas para que a los presos políticos se les trate con toda la consideración compatible con el estado actual de nuestras cárceles.

Respecto a la otra pregunta, debo decir al Sr. Ortiz de Zárate que no tengo conocimiento de esos abusos que supone cometidos por las autoridades locales. No tiene el Gobierno noticia de qué alcalde sean esos que permiten que unos mozos hagan una cosa y no permiten que la hagan otros; pero presumo por la manera de hacer la pregunta S . S., que no es tanto por arbitrariedad de las autoridades locales como por el intento de los mozos, a los cuales se les prohíbe hacer ciertas cosas, por lo cual proceden los alcaldes de la manera que ha dicho el señor Ortiz de Zárate. Parece ser, Según se deduce de las palabras de S. S:, que los mozos de esos pueblos están divididos en dos grupos: mozos que no se han sublevado y mozos que se han sublevado. Los mozos que se han sublevado quieren hacer alarde todavía del acto que cometieron, reuniéndose todos ellos (El Sr. Ortiz de Zárate pide la palabra para rectificar) y haciendo manifestaciones por la noche, y quizás sean esas manifestaciones Ias que el alcalde trata de evitar. Por lo demás, no se comprende que para asistir a las funciones del pueblo, para recrearse unos y otros mozos, haya una separación de tal naturaleza, que diga el alcalde: "tú, mozo, te puedes divertir, porque no te has sublevado; y tú, mozo, que te has sublevado, no te puedes divertir, y te vas a tu casa." Lo que hay es que esos mozos que se sublevaron todavía harán alarde de la sublevación, y de vez en cuando, ya que no puedan hacerlo con las armas en la mano, intentarán hacer manifestaciones políticas a pretexto de diversiones particulares; y como eso efectivamente puede dar lugar a disturbios y a conflictos, las autoridades hacen bien en evitar esas divisiones, y deben procurar que tanto los que se han sublevado, como los que no se han sublevado, se reúnan y busquen juntos placeres y entretenimientos que no produzcan divisiones en los pueblos.

Por lo demás, el Gobierno se enterará; y si hay, en efecto, arbitrariedades por parte de las autoridades, procurará no sólo evitarlas, sino castigar las que se hayan cometido.



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